Dios habla claramente en su palabra y enseña que pensaba de los dioses de los pueblos como los babilonios, medos y persas, griegos y el Imperio Romano:

Salmos 96:5: Porque todos los dioses de los pueblos son ídolos;
Pero Jehová hizo los cielos.

Para Dios todos estos pueblos estaban bajo la esclavitud del pecado de vanidad, sea hacían inútiles, estaban confundidos, por seguir a ídolos que no ven ni entienden.

Más Jehova hizo los cielos.

Isaías 44:9: Los formadores de imágenes de talla, todos ellos son vanidad, y lo más precioso de ellos para nada es útil; y ellos mismos son testigos para su confusión, de que los ídolos no ven ni entienden.

Solo hay un Dios digno de ser alabado,venerado y honrado, quien nos salva no con espadas ni con ejércitos.

Nuestro Dios nos mira y entiende todo, además nos salvó de nuestros pecados.

Nuestra salvación no es una obra hecha por nuestras propias manos, si así fuera seriamos nuestros propios salvadores.

Dios nos salva por su misericordia:

Tito 3:5: nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo,

Jesucristo murió y resucitó de los muertos para que nosotros recibamos la ayuda de Dios por medio de él.

La salvación de Dios la encontramos en el Hijo de Dios que es el Señor Jesús:

Hechos 4:11-12: Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del ángulo, Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.

Podemos creer con todo el corazón en el Señor Jesucristo y el que en él cree no será confundido y menos avergonzado.