PENSAMIENTOS SOBRE EL NUEVO NACIMIENTO

Juan 3:5: Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no NACIERE de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.

Nicodemo un hombre con mucha sabiduría y conocimiento de la ley de moisés estaba frente a Jesús y no entendía quien era Jesús, y  no sabía como nacer de nuevo. Nicodemo pensó que debía volver a entrar al vientre de su madre.

Esto nos muestra que nadie puede nacer de nuevo solo por saber mucho sobre la palabra escrita de Dios, sino por fe en Jesús el Cristo.

Creemos que Jesús es el Mesías ungido por su Padre con el Espíritu Santo. Creemos que Jesús es el Hijo de Dios. Creemos que Jesús fue resucitado de los muertos por el Padre al tercer día.

Por la fe en Jesucristo hemos nacido de nuevo.

Hemos nacido de nuevo por que Cristo está en nosotros y nosotros en Cristo:

 2 Corintios 5:17: De modo que si alguno está en Cristo, NUEVA CRIATURA ES; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas. 

Los que hemos nacido de nuevo hacemos obras dignas de arrepentimiento:

Hechos 26:20: sino que anuncié primeramente a los que están en Damasco, y Jerusalén, y por toda la tierra de Judea, y a los gentiles, que se arrepintiesen y se convirtiesen a Dios, haciendo obras dignas DE ARREPENTIMIENTO. 

las obras dignas de arrepentimiento son una petición de Dios a todos los nacidos de nuevo, pero no son una demanda de Dios en la cual nos pide que hagamos esas obras confiando en nosotros mismos,  NO  podemos hacer estas obras dignas de arrepentimiento con nuestras propias fuerzas, inteligencia o capacidad.

Somos nuevas criaturas porque el Espíritu Santo mora en nosotros y es él quien nos da la fuerza, inteligencia y capacidad de hacer las obras dinas de arrepentimiento.

Una nueva criatura es aquella persona que por creer en Jesucristo recibe al Espíritu Santo en su interior y cuando entra el Espíritu Santo, junto con él entra Jesús Cristo, y junto con Cristo entra el Padre.

Así que una nueva criatura tiene al Padre, al Hijo y el Espíritu Santo morando en su interior.

Las obras dignas de arrepentimiento no son obras según nuestra imaginación, son obras que detalla la palabra de Dios escrita, podemos ver esas obras hechas por el mismo Jesús, aunque él no tenia de que arrepentirse, vivió una vida sin pecado agradando en todo a Dios.

Las obras dignas de arrepentimiento significa que ya no viviremos haciendo nuestra propia voluntad, y sino que haremos la voluntad de Dios está enseñada en su palabra escrita.

Vivir en arrepentimiento es vivir confiando en que necesitamos la ayuda del Espíritu Santo quien nos permite hacer las buenas obras para agradar a Dios.